Pero no. Nos referimos al Metro, el medio de transporte que solo encontramos en nuestro país en el D. F. , en Monterrey y en Guadalajara.
En otras ciudades del mundo también hay, como en Nueva York.
Ahí es donde comenzó una moderna historia de amor.
Patrick Moberg, un diseñador de páginas web, ilustrador, especialista en bailar el trompo en una uña y no se que tantas jaladas, se subió al metro el 4 de noviembre de 2007 y vió a la chica de sus sueños...
Bueno pues este tipo también le sacateo y se le trabaron las quijadas así que no le dijo nada...
Uno que ha vivido alguna historia similar sabrá que no pasa de eso, una visión momentanea que se olvida cuando te bajas del camión.
Pero ¡que pasa cuando decides que tu visión trascienda? ¿De qué eres capaz con tal de conseguir el contacto con esa persona desconocida?


Para los que ya conocen esta historia sabrán que la chica apareció 48 hrs después, por medio de un conocido en común. Patrick conoció a Claire Hayton, que no esperaba ser buscada por tanta gente en vivo y en internet. Fue un amor a primera vista, que gracias al ingenio y la tecnología, se pudo lograr.
¿Que dijeron? ¿Esto es un final feliz como los de las novelas y los cuentos para niños?
Pues no... como hemos demostrado en otras publicaciones, el amor eterno dura aproximadamente 3 meses...
En este caso, la historia terminó a los 2 meses, quedando como amigos... ahhhh!
Resulta que la imaginación de Patrick no fue suficiente para mantenerlo unido a su pareja.
Queda pues como una anecdota de este mundo de las comunicaciones, donde las demostraciones mas apasionadas de cariño parecen ser los iconos gestuales o emoticonos y las caritas con punto y coma y cerrar parentesis... ;)
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